Por Javier Fariñas Martín
“Aquí me dedico a sanar el corazón físico”. Son palabras de una mujer que ha hecho de la cardiología su vida. Pero también de una misionera que con su trabajo, su testimonio, sus palabras o su compromiso algo habrá hecho por ese corazón intangible que sufre aunque no duela. Entre consulta y consulta escuchamos a la comboniana italiana María Pedrón, 40 años como misionera en Mozambique.