Por Ismael Piñón
De no contar prácticamente para nadie, Chad se ha convertido en los últimos años en pieza clave en la región, hasta el punto de ser considerado hoy como el gendarme de África Central. Cuando se cumplen 25 años de la llegada de Idriss Déby al poder, este inmenso país de más de un millón de kilómetros cuadrados (dos veces España) y apenas 12 millones de habitantes está saliendo del anonimato internacional y es hoy un interlocutor incuestionable en la lucha contra el terrorismo islámico.