Por Eva Filgueira Guimerá
Un cuarto de siglo es poco o mucho tiempo, depende de la perspectiva con la que se mire un acontecimiento. Por eso el fin del apartheid es algo todavía demasiado cercano para muchos. No en vano, hay muchas huellas muy tiernas de aquello. El consumo cultural y, en especial, la visita a los museos, forma parte de ese pasado en el que se asociaba por ley la cultura a la comunidad blanca. Por eso la mayoría de los museos del país están casi vacíos. Algunos, como el Distric Six Museum rompen esa dinámica.