Publicado por Javier Fariñas Martín en |
Entre 2014 y 2022, el número de peticiones para conseguir un visado Schengen, que permite la estancia durante 90 días y libertad de movimientos por este territorio, descendió en cerca de nueve millones. En ese período se pasó de 16,7 a 7,6 millones de solicitudes procedentes de todo el mundo, según un informe del director del Programa de Jóvenes Líderes Africanos en la Escuela de Gobernanza Transnacional, Mehari Taddele Maru. En ese tiempo se incrementó, de manera notable, la proporción de peticiones rechazadas, que pasó del 5 al 17,5 %. En el caso de África, las solicitudes denegadas sobrepasaron la media, alcanzando el 30 %. Uno de cada tres africanos vio cómo le frenaban incluso antes de haber dado un solo paso hacia el Viejo Continente. Siete de los diez países con mayor número de rechazos son africanos: Argelia (179.409), Nigeria (39.189), Senegal (23.683), Ghana (18.363), Malí (9.219), Guinea (4.791) y Guinea-Bissau (3.611). Para Maru hay dos factores que lo explican: cuanto más pobre es un país y más débil su pasaporte, menos posibilidades hay de que sus ciudadanos alcancen tierra europea. Son solo datos. A nosotros no nos apetece que vengan, pero puede que a ellos, cada vez, les guste menos venir. Total, para lo que les ofrecemos…
Fotografía: 123RF