La Buena Noticia

La noticia más importante que ofrecemos a nuestros lectores en este número aparece publicada en la página dos. Es el anuncio de la «gran alegría» de la Navidad que protagoniza Jesús: «Os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es el Mesías, el Señor». No es una noticia más, es la Buena Noticia –con artículo determinado y en ­mayúscula– desde la cual nos acercamos con una esperanza renovada al resto de la actualidad, tanto la que consideramos buena como la que no lo es en absoluto.

Tierra Santa, el lugar geográfico donde por primera vez resonó la Buena Noticia, está hoy inmersa en una guerra que, como se analiza aquí, ya está afectando negativamente al continente africano. Esta es una mala noticia, como lo es también la guerra que sufre Sudán desde hace ocho meses y que, como recordó el Papa durante el rezo del Ángelus del pasado 12 de noviembre, «no da indicios de detenerse y está causando numerosas víctimas, millones de desplazados internos y refugiados en los países vecinos, y una gravísima situación humanitaria». Este conflicto «con tintes de genocidio», se está centrando últimamente con gran crudeza en Darfur Occidental y afecta principalmente a las poblaciones negras de la región.

Como «revancha», sí que podemos calificar de buena noticia el desenlace de los comicios presidenciales en Liberia. Dos décadas después del final de la guerra civil, el país ha celebrado elecciones libres y sobradamente transparentes que han dado la victoria por un puñado de votos al candidato de la oposición, mientras que el presidente saliente reconocía honradamente su derrota. Esta transición tranquila aporta «una luz de esperanza para la democracia en África» que esperamos que pueda brillar también en República Democrática de Congo.

Los congoleños están llamados a las urnas el 20 de diciembre para elegir a su presidente y a los diputados que les representarán en la Asamblea Nacional y las Asambleas provinciales. La campaña electoral en curso está siendo incierta, sobre todo con respecto a la elección presidencial. Desde que en 2011 se decretara la elección del jefe del Estado a una sola vuelta, las posibilidades de la oposición de obtener la victoria aumentan cuando se establecen alianzas entre los candidatos, por lo que es probable que en los próximos días asistamos a acuerdos entre los ahora presidenciables. Pase lo que pase, deseamos ofrecer buenas noticias cuando contemos el desenlace electoral.

Muchas otras buenas noticias encontrará el lector escarbando entre las líneas de este número de MUNDO NEGRO. Lo será sin duda descubrir el trabajo inmenso que desde hace años se lleva a cabo en Angola, de manera constante y organizada, a favor de las personas inmigrantes y refugiadas, o también la lectura de los testimonios misioneros, que, aunque a veces relaten situaciones difíciles, siempre abren una ventana a la esperanza.

Terminamos igual que hemos comenzando, invocando el nombre de Jesús, el único nombre propio de persona que intencionadamente hemos querido escribir en esta página editorial para significar la centralidad que Él debe tener en la vida de quienes nos decimos cristianos. Jesús es el centro de la Navidad y el protagonista de la Buena Noticia que gratuitamente nos es ofrecida.

¡Feliz Navidad!



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